Aseguran que el futbol, como en la vida, te ofrece revancha. Eso es lo que espera exactamente Javier Hernández, una segunda ocasión y revancha profesional con LA Galaxy. Chicharito procurará dejar la temporada 2020 atrás y iniciar otra vez.
Los meses de inacción gracias a la pandemia, sumado a las lesiones musculares, no han permitido a Hernández enseñar su máximo potencial en la cancha. La sequía goleadora y sus temas fuera de la cancha, acabaron por transformarlo en la enorme decepción del año y en el peor fichaje de la temporada 2020 en la MLS. Disputó 12 partidos y solamente transformó 2 tantos.
Gonzalo Higuaín. Fue el último fichaje bomba que llegó a lo largo de la temporada. El Pipita firmó hasta con Inter Miami para ser su goleador y más allá de que llegó a ser su capitán, su aporte estuvo lejos de las esperanzas: nueve partidos, 2 asistencias y solamente un gol de tiro libre.
Rodolfo Pizarro. Inter Miami pagó $17 millones de dólares estadounidenses para transformarlo en su jugador licencia, mas no estuvo a la altura. Más allá de que jugó 19 partidos en la temporada, donde registró 4 tantos y 4 asistencias, no fue el jugador desequilibrante que en USA aguardaban.
Jürgen Damm. Llegó al Atlanta United desde Tigres, donde ganó 4 títulos de Liga MX, para remarcar la región de ataque tras la salida del argentino Gonzalo Martínez; se afianzó como titular, mas no logró diferenciarse. Disputó 14 partidos con tres asistencias y sin tantos.
Lucas Cavallini. Tras lucirse como goleador en el Puebla, el delantero canadiense llegó con letrero de figura a su país natal, para jugar en Vancouver Whitecaps; por otro lado, no ha podido conseguir que su conjunto clasificara a playoffs, y en 18 partidos jugados, solamente anotó seis tantos.