Después de caer a lo largo de la semana frente a la Juventus, lo que le puso algo de emoción al campeonato, Milan se recobró con una clara victoria por 2 a 0 frente al Torino, en San Siro, para ratificar su liderazgo dado que con este triunfo, sin importar lo más mínimo los otros desenlaces, acabará de nuevo la fecha como único puntero de la Serie A italiana.
Los hombres del técnico Stefano Pioli, que padecieron una derrota el pasado miércoles por vez primera en los últimos 27 encuentros ligueros, se reencontraron con la victoria y suman hoy día 4 puntos de virtud sobre el Inter de Milán, segundo, que visita este domingo a la Roma, tercero.
El español Brahim Díaz fue entre las figuras resaltadas del partido dado que dio la asistencia a Leao para el gol del 1-0 en el minuto 25, con un increíble toque vertical tras una enorme acción personal del francés Theo Hernández. Leao la aprovechó para fulminar al arquero Salvatore Sirigu, exjugador del Sevilla o bien de Osasuna, con un tiro con la pierna derecha.
Y 11 minutos después logró un penal con una tremenda profundización en el área saliendo de la banda derecha. Regateó a Simone Verdi y llevó al máximo al delantero Andrea Belotti, poco habituados a proteger, quien lo derribó. Fue el marfileño Frank Kessie, con su sexta diana de la temporada, quinta desde el punto de penal, quien lo convirtió y dio una doble virtud a los hombres de Stefano Pioli.
Padeció más en la reanudación el Milan, con menos ritmo y acierto en los pases. Se atemorizó en el minuto 50, en el momento en que el árbitro concedió al principio un penal al Torino, antes de comprobar la acción el VAR y revertir la resolución. Además de esto, en esa acción, Sandro Tonali se lesionó y abandonó el campo en camilla.
Mas el cuadro milanista se salvó y ha podido administrar su virtud hasta el tramo final, en el momento en que Pioli dio paso a Ibrahimovic para los últimos diez minutos, a fin de que recuperara ritmo tras más de un mes y medio de baja por una lesión muscular.